Hoyuelos en las mejillas

Los hoyuelos en las mejillas son pequeñas hendiduras que aparecen en la piel cuando una persona sonríe. Pueden estar en ambos lados de la boca o solo en uno. Se consideran adorables y son vistos como un signo de belleza y simpatía. Pero, ¿alguna vez te has preguntado qué causa los hoyuelos y por qué algunas personas los tienen y otras no?

Resulta que todo tiene que ver con los músculos faciales, específicamente con el músculo cigomático mayor, que es responsable de la sonrisa. En las personas con hoyuelos, este músculo es ligeramente diferente: a veces se divide en dos partes que se conectan a la piel en distintos puntos. Cuando una persona sonríe, estas dos partes tiran de la piel, creando la pequeña hendidura que conocemos como hoyuelo. En realidad, es una pequeña particularidad anatómica, ya que esta variación muscular no ocurre en todas las personas. Con el tiempo, los hoyuelos pueden volverse menos visibles, especialmente si eran pequeños al principio, debido a la pérdida de elasticidad de la piel.

Algunos bebés nacen con hoyuelos que desaparecen a medida que crecen, a menudo debido a cambios en la estructura de sus caras. Un hoyuelo en la barbilla, conocido como barbilla partida, se forma porque la mandíbula inferior no se fusiona completamente durante el desarrollo. Y aunque los hoyuelos suelen asociarse con la juventud, pueden persistir hasta la vejez, dependiendo de la estructura facial de la persona.

Muchas personas creen que los hoyuelos hacen que uno parezca más joven, amigable y accesible. Añaden un toque de individualidad y encanto. En muchas culturas, incluso se consideran símbolos de buena suerte y belleza.

Si no naciste con hoyuelos, ¡en realidad puedes hacerte unos quirúrgicamente! El procedimiento se llama dimpleplastia y es una cirugía estética que crea hoyuelos ajustando los músculos y la piel de las mejillas.

¿Son hereditarios los hoyuelos?

Sí, la genética juega un papel, pero no es tan simple.

Los hoyuelos suelen considerarse un rasgo dominante, lo que significa que si uno de los padres tiene hoyuelos, es probable que el hijo también los tenga. Pero no es una garantía. Es un poco más complicado: los hoyuelos pueden “saltar” generaciones, por lo que podrías tener hoyuelos aunque tus padres no los tengan, o podrías no tenerlos aunque tus padres sí los tengan. Parece que intervienen varios genes e incluso algunos factores externos.

Los hoyuelos son una fascinante combinación de genética y anatomía facial que ha cautivado a las personas durante siglos. Ya sea que hayas nacido con ellos o decidas tenerlos más adelante, son una característica única y atractiva del aspecto físico.